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 Es muy probable que te hayas encontrado en una situación como esta: revisas tu teléfono y descubres varias llamadas perdidas que no notaste antes. Al revisar el registro de llamadas, te das cuenta de que provienen de números internacionales desconocidos, sin relación con personas que conoces. Comienzas a preguntarte por qué recibiste esas llamadas. Tal vez fue un simple error al marcar, especialmente porque algunos códigos de país pueden ser similares. O quizás un amigo o familiar en el extranjero intenta contactarte en una emergencia, pero no puede costear una llamada internacional, esperando que tú le devuelvas la llamada. También podrías pensar que es una empresa internacional legítima tratando de contactarte por razones comerciales.
¿Por qué recibes llamadas de números de teléfono internacionales inesperados? ¿Cuál es su origen y por qué las recibes? ¿Cómo puedes protegerte?
Sin embargo, en la mayoría de los casos, estas llamadas distan mucho de ser inocentes. De hecho, son parte de una estafa global conocida como "fraude Wangiri"Wangiri fraud , un término japonés que literalmente se traduce como "fraude de una llamada". Este tipo de estafa se ha vuelto cada vez más común en los últimos años, donde se realizan breves llamadas internacionales que se cortan después de un solo timbre, buscando que la víctima devuelva la llamada.

Razones para recibir llamadas telefónicas de números internacionales aleatorios y cómo lidiar con ellas

En este artículo, analizamos el fenómeno de las misteriosas llamadas internacionales que puedes recibir de vez en cuando, explicamos sus causas y qué pasos debes tomar para protegerte.

El concepto es simple pero muy efectivo. Recibes una llamada de un número internacional desconocido y la persona que llama cuelga antes de que puedas responder, lo que te deja con la curiosidad de saber la identidad de la persona que llama o el motivo de la llamada. Si decides devolver la llamada, serás redirigido a servicios premium con cargos extremadamente altos y, en algunos casos, es posible que te cobren tarifas exorbitantes por cada minuto que permanezcas en la línea.

Esta estafa se aprovecha de la curiosidad de la víctima o incluso de la preocupación de que la llamada pueda ser de alguien que conoce y que necesita ayuda. Aquí es donde reside el peligro: la estafa depende de que tú inicies la llamada de retorno, lo que te hace responsable de los altos costos de la llamada.

Por lo tanto, si recibes llamadas de números internacionales desconocidos, es fundamental que tengas cuidado. Es mejor no devolver la llamada a esos números y estar atento a otras señales de actividad fraudulenta asociadas con la llamada. Ser cauteloso y tomarte tu tiempo para evaluar la situación es clave para evitar ser víctima de este tipo de estafa.

La trampa de las llamadas perdidas de números internacionales

Esta estafa explota la curiosidad natural de las personas al recibir una llamada de un número desconocido, especialmente si es internacional. Normalmente, la gente siente una fuerte necesidad de saber quién intentó contactarlos, lo que a menudo los lleva a devolver la llamada. Aquí es donde comienza la estafa. Al devolver la llamada a un número internacional extraño, se generan cargos extremadamente altos. Si bien las llamadas internacionales suelen ser costosas, contactar con números fraudulentos aumenta considerablemente el costo. El precio por minuto puede llegar a ser de varios dólares, lo que supone una carga financiera significativa para la víctima.

Los estafadores explotan nuestra curiosidad natural

Este método de fraude es una de las técnicas comunes que los estafadores utilizan para obtener ganancias económicas de manera ilegal. El proceso comienza con una serie de pasos cuidadosamente planificados diseñados para atraer y explotar a las víctimas económicamente.

Primero, los estafadores utilizan centros de llamadas operados por personas o sistemas automatizados para hacer miles de llamadas internacionales rápidas a una gran cantidad de números de teléfono. La llamada se corta antes de que la otra parte tenga la oportunidad de contestar, dejando una llamada perdida en el registro del teléfono de la víctima. A menudo, las víctimas no notan la llamada perdida hasta que ha pasado un tiempo, lo que despierta su curiosidad.

El siguiente paso se basa en la curiosidad humana, ya que los estafadores anticipan que algunas víctimas devolverán la llamada al número desconocido para averiguar por qué la perdieron. Una vez que la víctima llama de vuelta, es dirigida a un mensaje de voz pregrabado, música de espera o un agente de un centro de llamadas que intenta mantenerla en línea el mayor tiempo posible. El objetivo es prolongar la duración de la llamada para aumentar los cargos adicionales en la factura telefónica de la víctima.

En otros casos, los estafadores emplean métodos más sofisticados. Por ejemplo, pueden hackear los sistemas telefónicos internos de grandes empresas u organizaciones reconocidas. Luego, aprovechan esta vulnerabilidad para hacer miles de llamadas automatizadas a números específicos que controlan. Estos números están vinculados a un sistema financiero que recoge el dinero para los estafadores.

Aunque las pérdidas financieras para cada víctima individual pueden ser pequeñas, acumuladas a gran escala, el monto total puede ser considerable, llegando en algunos casos a millones de dólares.

El coste oculto de este tipo de estafas

Las líneas anteriores dejan claro que llamar a los números de los estafadores puede costarles cantidades relativamente altas en comparación con las llamadas internacionales regulares, lo que podría llevarte a pensar que están "operando a pérdida". Pero, ¿cómo logran los estafadores sacar provecho de esto? La respuesta está en el uso de un tipo especial de números conocidos como números de tarificación adicional. Estos números tienen características únicas que los diferencian de los regulares, como imponer cargos significativamente más altos en comparación con los números regulares o internacionales. Además, los propietarios de estos números reciben una parte del costo de cada llamada entrante.

Los números de tarificación adicional están disponibles en la mayoría de los países, y es posible que hayas visto que se usan durante concursos de televisión, por ejemplo. Aunque estos números están diseñados originalmente para servicios legítimos como líneas de ayuda, consultas o apoyo emocional, los estafadores abusan de ellos para generar ganancias ilícitas.

En cuanto al aspecto legal de las estafas de llamadas internacionales, la mayoría de los países imponen leyes estrictas sobre el uso de números de tarificación adicional. Estos números generalmente solo están disponibles para empresas autorizadas y están sujetos a un monitoreo constante para evitar su uso indebido para fraudes y engaños. En algunos casos, los propietarios de estos números incluso están obligados a revelar el coste de la llamada con antelación para evitar que los usuarios pierdan dinero sin saberlo. Sin embargo, combatir este tipo de fraude sigue siendo un reto importante para las autoridades legales y reguladoras debido a varios factores, entre ellos la dificultad de rastrear a los estafadores, que suelen utilizar técnicas avanzadas para ocultar su identidad y ubicación real. Además, existen lagunas normativas en determinados países, especialmente en partes de África y el sur de Asia, donde las leyes que rigen los números de tarificación adicional son menos estrictas. Esto permite que casi cualquier persona obtenga dichos números, motivo por el que a menudo las estafas de llamadas internacionales se originan en estas regiones.

¿Qué hacer si eres víctima de este tipo de fraude?

Las estafas de llamadas perdidas internacionales son uno de los tipos de fraude más peligrosos y extendidos en el mundo digital actual. A medida que estas estafas se han vuelto más comunes, han surgido diversas creencias y malentendidos, especialmente en las redes sociales. Una de las creencias más extendidas es que al contestar una llamada internacional desconocida, pueden robarte tus fotos o datos personales simplemente al atender la llamada. Esta afirmación no tiene ninguna base científica o técnica; es solo un rumor destinado a generar miedo entre los usuarios.

Otro mito sugiere que al contestar tales llamadas, te expones a sonidos dañinos o que los estafadores pueden hipnotizar a las víctimas, lo cual es completamente falso y carece de respaldo en evidencia creíble.

La realidad es que las llamadas de los estafadores no pueden hackear tu teléfono ni robar tus datos solo por contestarlas. El verdadero peligro radica en los altos cargos que pueden generarse si decides devolver la llamada a esos números internacionales. Estas llamadas pueden causar deducciones significativas de tu saldo, especialmente si los números pertenecen a servicios de pago o a países con tarifas de llamadas elevadas.

Para protegerte de este tipo de estafas, debes evitar devolver llamadas de números internacionales desconocidos, incluso si llaman repetidamente. Si tu trabajo requiere recibir llamadas internacionales, es mejor utilizar aplicaciones como "Truecaller" para verificar la identidad del llamante antes de contestar o devolver la llamada.

Si ya has sido víctima de esta estafa devolviendo una llamada a un número internacional desconocido y has perdido una gran cantidad de crédito, hay algunos pasos importantes a seguir. Si el fraude es local, puedes denunciarlo a la policía, quien investigará junto con los proveedores de servicios locales y posiblemente tomará acciones legales contra los estafadores. Sin embargo, en el caso de un fraude internacional, la investigación se complica mucho más debido a los desafíos de la cooperación internacional y la coordinación con las autoridades en el país donde se encuentra el estafador.

En algunos casos, las compañías de telecomunicaciones pueden compensar a los usuarios que han sido afectados por este tipo de estafa, pero dicha compensación es rara y generalmente ocurre en casos de fraudes a gran escala que afectan a un número significativo de usuarios. En casos individuales, obtener compensación puede ser complejo y usualmente solo es posible en países con sistemas de protección al consumidor fuertes y avanzados.

Otros tipos de fraude telefónico

Si bien el fraude a través de llamadas internacionales perdidas es una de las formas más comunes de fraude telefónico, no es el único tipo del que debemos tener cuidado. Existen otros métodos que los estafadores utilizan para lograr sus objetivos y es importante estar al tanto de ellos para evitar caer en sus trampas.

1. Fraude mediante malware
Uno de los métodos más populares utilizados por los estafadores implica el uso de malware o técnicas de piratería. A través de estos métodos, los piratas informáticos pueden tomar el control de los sistemas telefónicos o redes pertenecientes a empresas u organizaciones. Cuando estos sistemas son administrados por computadoras, el pirata informático puede explotar este acceso para realizar llamadas repetidas a números premium de su propiedad, todo ello sin que la empresa se dé cuenta de lo que está sucediendo.

2. Explotación de aplicaciones para teléfonos inteligentes
Otro método común implica la explotación de aplicaciones para teléfonos inteligentes. Los estafadores crean aplicaciones que se parecen a aplicaciones populares y queridas, alegando que estas versiones modificadas ofrecen funciones adicionales. Por ejemplo, la aplicación "WhatsApp Plus" ha sido reportada como una de las aplicaciones sospechosas.

En estas aplicaciones maliciosas, los estafadores incorporan malware que les permite enviar mensajes de texto en secreto a números de servicio internacionales de su propiedad. Para ocultar estas actividades a los usuarios, los estafadores eliminan estos mensajes (a menudo costosos) del registro del teléfono, lo que dificulta que los usuarios detecten el fraude.

3. Restricciones de seguridad modernas
Afortunadamente, estos métodos de fraude se han vuelto más difíciles de ejecutar en los últimos tiempos. Las versiones recientes de sistemas operativos como Android e iOS han impuesto restricciones estrictas al acceso de las aplicaciones a funciones sensibles. Por ejemplo, se requiere el permiso explícito del usuario para realizar llamadas o enviar mensajes de texto, lo que ayuda a reducir las posibilidades de explotar vulnerabilidades.
A la luz de la continua evolución de las técnicas de fraude, es fundamental estar al tanto de los métodos utilizados y tomar las precauciones necesarias. Ya sea evitando aplicaciones sospechosas o siendo cauteloso al tratar con llamadas y mensajes desconocidos, podemos reducir los riesgos de ser víctima de un fraude telefónico.

No todas las llamadas internacionales son intentos de estafa

El fraude mediante llamadas perdidas de números internacionales se considera una de las formas más comunes de estafas telefónicas, pero no es el único método. Este tipo de estafas se basan en engañar a los consumidores de diversas formas. Una de las técnicas más destacadas es el engaño directo, en el que los estafadores utilizan números de países como Estados Unidos o países europeos para infundir confianza en el destinatario.

Una vez que la víctima responde a la llamada, los estafadores recurren a tácticas como amenazas o intimidación, o intentan convencer a la víctima de que compre un producto específico bajo diversos pretextos. Por ejemplo, algunos estafadores se hacen pasar por representantes de atención al cliente de empresas conocidas como Microsoft, convenciendo a las víctimas de que compren un "poderoso programa de protección" con el pretexto de que sus dispositivos están en riesgo.

A medida que evoluciona la tecnología, también lo hacen los métodos de fraude, lo que requiere que permanezcamos atentos e informados sobre cómo actuar en tales situaciones. La prevención es la mejor defensa contra este tipo de estafas, y es fundamental comprender cómo funcionan y adoptar prácticas seguras al usar los teléfonos.

 Recuerde siempre: si algo parece sospechoso o demasiado bueno para ser verdad, es probable que lo sea. Si somos más conscientes y cautelosos, podemos reducir las posibilidades de ser víctimas de este tipo de fraudes y protegernos a nosotros mismos y a nuestra información personal.
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